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En días recientes, se reseñó el desalojo de dos escuelas en San Juan, los planteles University Gardens y Juan José Osuna, tras una presunta amenaza de tiroteo a través de mensajería de texto contra ambas. Acto seguido, la reacción del Departamento de Educación de Puerto Rico (DEPR) fue la de desalojar los planteles. A todas luces, esta pareciera ser la decisión más acertada. Sin embargo, este proceder no aparenta responder a una decisión racional y proactiva, sino que sugiere más una decisión reactiva que pudo haber resultado en una tragedia. Analicemos lo siguiente: en el proceso de desalojo de los planteles, ¿alguien ponderó la posibilidad de que los amenazantes estuviesen en el exterior de las escuelas con armas? ¿Alguien evaluó los problemas logísticos de movilidad y de exposición tras haber evacuado centenares de estudiantes a la vez? En definitiva, haber desalojado los planteles ante un evento como este no fue la mejor decisión.
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