El juez supremo Ángel Colón Pérez declara que lo peor que podría pasarle a Puerto Rico es que la justicia se convierta en una simple gestión de las cosas
El juez supremo Ángel Colón Pérez declara que lo peor que podría pasarle a Puerto Rico es que la justicia se convierta en una simple gestión de las cosas
La pregunta por la justicia no es nueva y ha desvelado a más de un filósofo desde la Antigüedad. Ya Platón, en las páginas de La República, abordaba el asunto con cuidado. No hay convivencia sin leyes, nos decía. También lo hizo Aristóteles, para quien la justicia consistía en darle a cada cual aquello que merecía. San Agustín, por su lado, argumentaba que la justicia solo podía provenir de Dios y que era, en última instancia, un don. Cultivar la virtud y la razón era una empresa humana indisociable de la vida en comunidad, sentenció.
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