

A finales de la década de los años 50 y principios de los 60, los militantes y líderes de la Juventud Estadista Puertorriqueña del antiguo y desaparecido Partido Estadista Republicano (PER) íbamos de pueblo en pueblo contando las pesetas del “serrucho” que hacíamos para echar gasolina y saciar la sed y el hambre en la carretera con galletas “cuca” y lascas de mortadela. En los pueblos y barrios que visitábamos la situación no fue distinta: trabajadores, obreros, pequeños comerciantes y viejos ya retirados aportando peso a peso para alquilar una vieja casa, pintarla con los tres colores del PER y de la nada crear un movimiento que enfrentara a la poderosa maquinaria gubernamental del Partido Popular Democrático.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: