

La Segunda Guerra Mundial es el recordatorio de que la humanidad puede atentar contra su existencia. Con el olor fresco a pólvora en Europa y tras la pérdida de millones de vidas, el 26 de junio de 1945 se firmó la Carta de las Naciones Unidas. Este proyecto internacional no nació de una voluntad abrupta e improvisada, sino que fue el resultado de una acumulación de experiencias históricas y proyectos fracasados -como la Liga de las Naciones- que obligó a la comunidad internacional a idear nuevas formas para prevenir la agresión entre países.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: