Toca a la gobernadora reanimar su gestión y la de su equipo para que las metas se cumplan, para que los recursos se usen juiciosamente, a tiempo y en cumplimiento con la normativa aplicable, plantea César R. Miranda
Toca a la gobernadora reanimar su gestión y la de su equipo para que las metas se cumplan, para que los recursos se usen juiciosamente, a tiempo y en cumplimiento con la normativa aplicable, plantea César R. Miranda
Resulta difícil imaginar un escenario político más convulso que el vivido por Puerto Rico a partir del verano de 2019. El 2 de agosto de 2019, el gobernador Ricardo Rosselló se veía forzado a abandonar su cargo, sin contar entonces con un secretario de Estado, primero en la sucesión constitucional para sustituirle. Surge entonces la confusa ocupación del cargo por el licenciado Pedro Pierluisi, dejada sin efecto por nuestro Tribunal Supremo.
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