Cruzando las fronteras del mar se da uno cuenta de la encrucijada reciente reflejada tanto en la prensa, tanto local como internacional. La masacre de los estudiantes en Iguala va acompañada en los titulares de la conmemoración de la caída del muro de Berlín y todos sus boyantes festejos del fin de una era y de la Guerra Fría. No muy lejos de esa sección también disfruta de portadas la reina Isabel II de Inglaterra en otras conmemoraciones, con demasiado fasto y rayando en el morbo, por el comienzo de la Primera Guerra Mundial en otros 9 de noviembre. Ataviada en su muy usual indumentaria de reina y jefa de estado que tuvo a su cargo de tanta carne de cañón de los que fueron sus súbditos desde Londres a Delhi, por lo cual este noviembre deja un mal sabor a cualquiera que piensa que estos muros, guerras y muertes se festejan con otros propósitos en mente.
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Un noviembre de murallas
La impermeabilidad de la muralla de Berlín siempre dependió del estado de la cuestión entre estos adversarios