Para progresar en la lucha contra la violencia de género no es necesario establecer remedios privilegiados para un género sobre otro, ni mucho menos colocar a los hombres y a las mujeres en posiciones adversariales, escribe Anabelle Torres Colberg
Para progresar en la lucha contra la violencia de género no es necesario establecer remedios privilegiados para un género sobre otro, ni mucho menos colocar a los hombres y a las mujeres en posiciones adversariales, escribe Anabelle Torres Colberg
La cuenta anónima en Instagram llamada Yo Te Creo, en la que se publicaban semanalmente nombres de personas (mayoritariamente hombres) que distintas mujeres -también de manera anónima- alegaban eran agresores sexuales, maltratantes, pedófilos, hostigadores, etc., fue una reacción a los recientes asesinatos por violencia de género que conmocionaron al país, como el de Andrea Ruiz Costas.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: