Prepara un mapa de sueños realizable que todos los días te recuerde lo que quieres hacer y cómo lograrlo
Imagínate que logras esa meta que tienes hace años de obtener una condición física óptima, que cada día, te levantas y te convences de que puedes comer rico y saludable, tener tiempo de descanso y en compañía de personas que son importantes para ti, y que puedes hacer el viaje que por tanto tiempo has soñado. Ahora, en vez de imaginarlo, obsérvalo y prepara un plan para hacer todos esos deseos realidad.
Para observarlo, puedes utilizar un vision board, también llamado mapa de los deseos. Es una herramienta que utilizan y recomiendan coaches y personalidades en el camino a cumplir sus metas a corto, mediano y largo plazo. Se trata de un espacio físico, que puede ser una cartulina, un papel o una pizarra, donde ubicas imágenes, fotos y escribes afirmaciones que representan aquello que deseas para tu vida. Y se valen visualizaciones de aspectos de salud, bienestar, finanzas, carrera, de relaciones y académicos, entre otros.
Verlo todos los días, acompañado de manifestaciones de intención, puede ser útil para muchas personas.
La publicista y maestra de yoga Ileana Arliz descubrió esta práctica hace unos 10 años. Actualmente, imparte cursos de desarrollo personal a mujeres emprendedoras, en los que comparte la utilización de esta herramienta.
“Cuando preparas un vision board, lo que estás es poniendo visible la intención y manifestación de lo que tú quieres hacer o lograr”, explicó.
“La idea del vision board es que tú lo pongas en un lugar visible, donde, cuando te despiertes y cuando te vayas a dormir, puedas verlo algunos segundos o el tiempo que tú desees. Es ese recordatorio al cerebro de que hacia eso vamos y que esta es nuestra intención”, agregó.
Visualizaciones íntegras y realistas
La fundadora del proyecto La mujer detrás del negocio, enfatizó que aquello que se pone en el vision board debe ser íntegro y realista. Significa hacer una evaluación honesta de las posibilidades porque “si pones una meta muy ambiciosa, en comparación con lo que tienes actualmente, no te la vas a creer y no vas a durar ni dos días en el esfuerzo por hacerla realidad”. Situaciones como esa pueden tener el efecto contrario de restar motivación y descartar cualquier pequeño logro que se haya tenido antes.
1. Desempolva tus revistas viejas, recurre al periódico o imprime todas esas fotos de Instagram y Pinterest que guardaste en algún momento porque te inspiran y muestran algo que quisieras hacer.
2. Pregúntate, ¿qué te hace falta para estar y sentirte mejor? Busca las imágenes o las palabras que te lo recuerden. Enfócate en aspectos de nutrición, actividad física, cuidados médicos y estrategias de prevención de enfermedades, así como del cuidado de tu salud mental, tus relaciones con otras personas y el cultivar tu espíritu.
Por ejemplo, mencionó Arliz, puede ser muy complicado para algunas personas incorporar en su rutina diaria la ingesta de ocho vasos de agua al día si la costumbre es apenas tomar dos. Lo ideal sería visualizar en el tablero o mapa de deseos múltiples formas de agua como un recordatorio de la importancia de tomar agua generosamente para, paulatinamente, incrementar la cantidad que se consume. Las representaciones en el vision board para esta meta de bienestar pueden ser imágenes de vasos de agua, pero también de lluvia y de cuerpos de agua.
“No puede verse ni sentirse como un sacrificio o un esfuerzo extremo, sino como un recordatorio, una afirmación que te motiva”, apuntó Arliz, quien también es coach holística de CEO Yogini.
Lo mismo aplica al consumo de frutas y vegetales, como parte de una dieta saludable. No funciona llenar el vision board de imágenes de estos alimentos si lo que va a provocar es una compra impulsiva y exagerada de frutas y vegetales que se van a dañar en la nevera.
Ubica tu vision board en un lugar que funcione para el propósito que lo has creado. Si compartes tu espacio con otras personas que no entienden lo que estás haciendo y podrían burlarse de tus intenciones, Arliz recomendó mantenerlo en una gaveta y sacarlo en las mañanas y en las noches.
Muy pocas cosas se van a hacer realidad de la noche a la mañana y otras tantas pueden hacerse realidad de formas que no imaginabas.
“Hay que hacer mucho trabajo interno porque lo que tú pongas, en verdad, tienes que creer que lo vas a lograr, que es posible y accesible para ti”, señaló. Claro, que muchas cosas que ubicarás en tu cartulina nunca las has tenido, pero, por eso, “tienes que darle la orden a tu cerebro de que vas a trabajar distinto para conseguirlo y aventurarte por otros caminos”.
Múltiples estudios de psicología han demostrado que hace falta mucho más que pensamientos positivos para lograr metas en la vida. Además, hace falta una revisión minuciosa de opresiones y privilegios, de las oportunidades que algunas personas tienen y otras no, y que están directamente asociadas al lugar donde nacieron, su género, sexo, clase social y hasta orientación sexual.
Además, ningún pensamiento positivo por sí solo va a generar cambios en las condiciones materiales de las personas. Hace falta acción.
“Fantasear con tu mundo perfecto y tu vida perfecta puede hacer que te sientas mejor a corto plazo, pero limitará tu capacidad para transformar tus sueños en realidad”, escribió el psicólogo y médico Neil Farber en la revista de psicología Psychology Today. Por eso, dice “convierte tus tableros de visión en tableros de acción”.
Y Arliz coincidió. “Mi responsabilidad es abrir esta oficina todos los días para mis metas financieras; hacer yoga, meditar, mover el cuerpo, y trabajar hacia eso que quiero para mi bienestar”.
¿Puede un vision board ayudarte en ese plan de acción? Si a ti te funciona, ¡adelante!
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